Un buen traductor
es aquella persona que sabe que su conocimiento nunca es suficiente, razón
por lo cual busca actualizarse constantemente para dar lo mejor de sí en cada
traducción. Además, un buen traductor debe dominar muy bien su idioma nativo
para que sus traducciones sean precisas y estéticamente bien estructuradas. Por
otra parte debe tener manejo de la nueva tecnología la cual le acortará el
tiempo que le toma cada una de sus traducciones. Un detalle importante de la
nueva tecnología es que hay muchas herramientas útiles en línea las cuales
están a un solo clic de sus manos. Otra característica de un
buen traductor es que no necesita ser muy talentoso, pero sí debe amar
su profesión, administrar muy bien su tiempo y apasionarse por
su trabajo. Por último, no es necesario ser inteligente sino perseverante
porque un buen traductor no es aquel a quien todo le sale perfecto sino que
comete errores y aprende de estos para mejorar como persona y profesional.
Imagen tomada de http://eljovenaristoteles.blogspot.com/2014/11/gestor-de-proyectos-de-traduccion-ideal.html